Una reciente sesión de la conferencia G2E en Las Vegas me dio la oportunidad de escuchar a expertos del sector hablar sobre el uso actual de la tecnología RFID (identificación por radiofrecuencia) en los casinos. Esta tecnología utiliza etiquetas de radio incrustadas en las fichas de los casinos para autenticarlas y permitir una recopilación de datos más precisa en el casino. La idea existe desde hace años, y Wynn Las Vegas utiliza este sistema desde 2005. Desde entonces, la tecnología ha ido mejorando poco a poco y más casinos han empezado a utilizar las fichas. Un experto que intervino en la conferencia indicó que unos 40 casinos de Estados Unidos utilizan actualmente chips con tecnología de radio.
Probablemente, la ventaja más atractiva para los casinos que ofrece la RFID es la capacidad de validar y autenticar fichas de gran valor. Las fichas falsificadas pueden ser una gran amenaza para un casino, y tener cada ficha incrustada con una etiqueta de radio y un número de serie puede ser un arma poderosa contra el fraude. Piense en el riesgo que supone que un fabricante envíe millones de dólares en fichas al casino. Con RFID, esas fichas no sirven para nada hasta que los números de serie se añaden oficialmente al inventario del casino.
Otra capacidad de estos sistemas es automatizar el proceso de recuento, tanto en la jaula del casino como en los estantes de los juegos de mesa en el suelo. Por lo que se comentó en la conferencia, la tecnología no permite actualmente un recuento totalmente automatizado en la jaula, pero se pueden contar los estantes del suelo. No sé por qué el recuento en toda la jaula sigue planteando un problema, pero este tipo de limitaciones parecía ser un tema común en toda la charla. El estado de la técnica aún no está a la altura.
Para los jugadores de juegos de mesa, hay dos formas en las que los chips RFID pueden ser problemáticos:
La primera es el uso de sensores debajo de cada círculo de apuestas para determinar con precisión la cantidad que apuesta un jugador. El beneficio para el casino es que las puntuaciones medias de las apuestas pueden ser precisas para cada jugador, y pueden eliminar las puntuaciones inexactas que a menudo permiten a los jugadores ganar comps por encima del nivel apropiado. Ver "Cómo un jugador de estrategia básica puede ganar al blackjack"para más información. Además, si estos datos de apuestas en tiempo real se pueden combinar con sofisticados programas informáticos de vigilanciaEl proceso de detección de muchas formas de juego con ventaja podría automatizarse.
La segunda preocupación es que las etiquetas RFID podrían permitir a un casino "asignar" fichas a un jugador concreto que las haya ganado en la mesa. Si el casino sabe quién es usted (o al menos tiene un perfil asignado), las fichas podrían asignársele específicamente. Si esas fichas desaparecen del inventario del casino durante un tiempo, si te gusta acumular fichas para jugar en el futuro, esta información sería un problema, sobre todo si alguien que no es el jugador original acaba jugando la ficha o cobrándola en la caja.
Afortunadamente, aunque el Los vendedores de sistemas pintan la RFID como una plataforma extremadamente capazSin embargo, sigue habiendo lagunas en todo este proceso. El casino es un entorno desordenado para este tipo de seguimiento ordenado. Los jugadores se mueven de una mesa a otra y las fichas están en constante movimiento. El tipo de seguimiento a prueba de balas que permitiría asignar fichas a jugadores específicos con un cierto grado de certeza simplemente no existe. En mi opinión, esto no cambiará en los próximos años. Un representante del sector lo admitió durante la sesión de la G2E. Cuando se le preguntó si el sistema podría asignar una ficha a un jugador concreto, su respuesta fue que "podría hacerse", pero lo dijo en un tono que dejaba claro que la tecnología actual no alcanza ese objetivo.
Puede haber algunas excepciones a esto, particularmente en el seguimiento de jugadores junket a los que se les pueden asignar fichas especiales inventariadas a su llegada. En ese caso de uso, el objetivo principal es asegurarse de que los jugadores junket están dando la acción esperada para su viaje.
Por ahora, la principal amenaza que la RFID supone para los jugadores de blackjack es que puede resultar difícil o imposible inflar el promedio de apuestas en la mesa. Para conseguirlo, el casino tendría que invertir mucho en sensores, que actualmente cuestan unos $10.000 para equipar una sola mesa de blackjack.
La RFID ya está aquí, pero aún no cumple sus promesas para el sector. Para los expertos, eso es bueno.
La razón por la que no se automatiza el intercambio de chips/efectivo con RFID es sencilla. Se pueden sobrescribir los RFID, además de otros graves riesgos para la seguridad.
Un aspecto positivo podría ser, que los crupieres piensan que están completamente controlados por el casino.
Como en "Lance Humbles - Greatest Book" el "Dealer es el Enemigo del jugador", el quizás no intentará engañarte.
Soy crupier de juegos de mesa. El casino en el que trabajo tiene los sensores RFID en la mesa. En la mesa hay un pequeño botón blanco para que el crupier lo pulse cuando cierra las apuestas. Cuando se pulsa el botón, se registra la apuesta. Bueno, esa es la teoría que hay detrás. Durante todo el tiempo que he trabajado en este casino el sistema ha estado desconectado. Es interesante ver a nuevos crupieres que siguen pulsando los botones tal y como se les ha enseñado.
¡Interesante! Quizá la dirección pretenda que los concesionarios pulsen el botón aunque el sistema esté desconectado. Algo así como tener un globo con cámara de vídeo aunque no haya una cámara real dentro 🙂 .